miércoles, 29 de junio de 2011

CADA SIETE OLAS. DANIEL GLATTAUER

Con un par de días de retraso, aquí está mi reseña. Es lo que tienen las vacaciones, dos días antes de irte toca hacer la maleta y dos días después de regresar deshacerla. Esto último suele ser más duro, la verdad es que no sé cómo no dura más tiempo, por eso de las depresiones postvacacionales... En fin, supongo que he tenido suerte al ponerme al día tan pronto.

Tenía esta novela pendiente desde el Continuará en Cada siete olas que ya se adelantaba en Contra el viento del norte, y no sabía muy bien qué esperar de ella así que supongo que por eso retrasé tanto su lectura, lo que sí tenía claro es que en algo debía ser distinta, si no, para qué molestarse en una segunda parte? y sólo podía ser distinta en una cosa.

No quiero extenderme mucho con el argumento porque:
1) Mirando en Internet (puede que sin querer o sin proponérmelo), me he dado cuenta de que mucha gente ya lo ha leído, por lo tanto saben de qué trata el libro.
2) A pesar de su rotundo éxito, soy consciente de que alguien habrá que aún no lo haya hecho. Pensando en ellos a)No quisiera meter la pata y contar más de la cuenta, b)Espero que al menos sí hayan leído la primera entrega, en caso negativo leer con cuidado el punto c) y c)El argumento, los protagonistas indiscutibles de esta historia son Emmi Rothner y Leo Leike que se conocieron, ya en la primera entrega, gracias a un mensaje de solicitud para la anulación de una suscripción a la revista Like y a un error de tecleo. Después de reincidir con una felicitación navideña colectiva, el intercambio de correos electrónicos se hace cada vez más frecuente y según evoluciona el contenido de esos emails, evoluciona la relación de ambos. Pero como no todas las historias tienen un final feliz, Leo se ve obligado a marcharse a Boston por diversos motivos, bueno, por diversos motivos, no, por uno sólo, huyendo de esta manera de todas las formas posibles en que se puede huir. Ahora para sorpresa de todos y de la propia Emmi, y después de varios Fw: AVISO DE CAMBIO DE DIRECCIÓN. EL DESTINATARIO YA NO PUEDE ACCEDER A SU CORREO. LOS MENSAJES NUEVOS SE BORRARÁN AUTOMÁTICAMENTE DE LA BANDEJA DE ENTRADA. EN CASO DE DUDA CONSULTE CON EL ADMINISTRADOR DEL SISTEMA, resulta que Leo ha vuelto y parece que el tiempo no ha pasado. Pero Leo no vuelve solo, trae consigo los sentimientos que un día desterraron. La cuestión es si se repetirá el mismo final.

Vaya! parece ser que todo se pega -la forma de escribir por puntos de Emmi es adictiva-. Sigo...

Mis impresiones, buenas o malas:
1)La novela me ha gustado mucho.
2)Me ha permitido darme cuenta de la importancia del lenguaje, del valor de la palabra escrita. Porque a)el autor consigue que con muy poquito sea fácil pensar en escenas, situaciones, sentimientos, estados de ánimo. Después de esto, yo digo: A la porra con lo de que una imagen vale más que mil palabras, y b)los protagonistas son capaces de cambiar o desarrollar varias veces sus frases con tal de escribir exactamente lo que desean (nadie dijo que expresar sentimientos fuera fácil). Pero el caso es que nunca antes fui consciente de las vueltas que se le puede dar a una misma idea, de los condicionantes que puede tener una sola situación.
3)Detesto, y ya van dos veces, perderme parte de la historia porque el autor sólo nos dé acceso a los correos que los dos protagonistas se envían, pero al mismo tiempo lo acepto como una parte importante del juego. Un precio que hay que pagar por la originalidad.
4)La historia ha despertado en mí muchos sentimientos, a) sorpresa, b) desesperación, c) exasperación, d) risa, e) tristeza. Seguro que se me olvida alguna.
Puntualizaciones a 4):
A c)cómo se pueden tener tan poco claras cosas que están tan, tan, tan...claras.
A d)me encanta la mordacidad de Emmi y muchas de las situaciones que provoca.
A e)algunos mensajes son tan fríos, cortantes y distantes que cuesta hasta leerlos.
5)No creo que ninguno de los dos haya evolucionado.
6)Aunque este final me parezca merecido, siento decir que me sigo quedando con el de Contra el viento del Norte. Quizá porque fue inesperado.
7)Esta novela me deja muchas frases, pero en especial las del último mensaje.

Qué pasa cada siete olas. Una de las mañanas que pasé en la playa, cada siete olas, volaba una sombrilla pero no puede ser eso, eso fue a causa del Viento del Norte. En la noche del San Juan, cada siete olas, un deseo, pero eso es una tradición. Creo que lo que pasa cada siete olas para mí seguirá siendo un misterio. Vale, Emmi tiene una teoría pero demasiado metafórica. Sólo sirvió para preguntarme si a lo largo de mi vida habré dejado pasar muchas séptimas olas, de algunas soy consciente por su evidencia pero cuántas más habrá habido.

Un saludo, Lola.


P.D no apta para los que no han leído el libro: Al poco tiempo de empezar con la novela me invadió una sensación extraña porque pensé que se volvía a tratar del mismo tira y afloja de los comienzos. El mismo tira y afloja de no tener las cosas claras. El mismo tira y afloja de no esperar lo mismo que el otro, de esperar más o menos que el otro... Pero en realidad es el tira y afloja del miedo. Miedo a empezar de cero y no saber cómo ni por dónde hacerlo. Miedo de no tomar la decisión correcta siendo conscientes de que las consecuencias afectarán a terceros. Una actitud muy honorable pero como queda demostrado nada real.

martes, 28 de junio de 2011

Asunto: La séptima ola

Aquí cuentan la historia de la indómita séptima ola. Las primeras seis son previsibles y equilibradas. Mantienen la continuidad. Seis intentos y siempre el mismo destino.

La séptima es imprevisible. Durante mucho tiempo pasa inadvertida, participa en el monótono proceso, se adapta a sus predecesoras. Pero a veces estalla. Siempre ella, siempre la séptima. Porque es despreocupada, inocente, rebelde, lo cambia todo. ¿Mejor o peor? Eso sólo pueden decirlo quienes fueron arrastrados por ella, quienes tuvieron el coraje de enfrentarla, de dejarse cautivar.


Página 178. Cada siete olas. D. Glattauer.

lunes, 27 de junio de 2011

Atrapando un sueño. Sherrilyn Kenyon

Ya estoy de vuelta y como prueba de ello, esta reseña. Como ya sabía antes de marcharme, El diablo puede llorar no iba a ser en esta ocasión, así que me decidí por Atrapando un sueño, a fin de cuentas no notaría la diferencia. Éste es la decimotercera entrega de la Saga Cazadores Oscuros, no sé si sabéis de ellos...

En resumidas cuentas y para no alargar esto en exceso, los cazadores oscuros son una especie de soldados inmortales creados por la diosa Artemisa para combatir a los diamons y proteger a los humanos de sus ataques, lo habitual es que fueran guerreros en la antigüedad, que murieran bajo traición y que invocaran a la diosa griega en busca de venganza, vendiendo su alma a cambio y pasando a su servicio. Por su parte, los diamons son unos seres parecidos a los vampiros aunque a mí no me lo parecen tanto, al menos no en origen, que un día fueron Apolitas, descendientes de la diosa Apolimia y maldecidos por Apolo a no poder salir a la luz del sol, tanto los odiaba que no quería verlos, y a morir una vez cumplidos los 27 años de vida. La única forma de dar esquinazo a esta sentencia de muerte es alimentarse de almas humanas, momento a partir del cual se convierten en diamons y en blanco de los cazadores oscuros.

Con el tiempo la cosa se ha ido complicando con leyendas y mitologías varias, con criaturas demoníacas, -demasiadas para mi gusto o para mi entendimiento-, dioses de otras culturas y otros tipos de cazadores. De hecho, el protagonista de esta historia es un Cazador onírico, otra especie de seres que viven en los sueños de los humanos y se encargan de su protección en ese plano. Sólo en dicho plano son capaces de sentir, -consecuencias de otra maldición-, por lo que hay algunos que frecuentan demasiado determinados sueños de determinados humanos. A éstos también hay que darles caza pues pueden agotar al humano del que se alimentan hasta la locura o la muerte. -Vaya, no me había dado cuenta de lo complicado que suena todo esto hasta que he empezado ha escribir sobre ello. Lo siento. De todas formas y por si os interesa he encontrado este blog que parece bastante completo http://cazadoresoscurosworld.blogspot.com, seguro que os aclara algo más-

Bueno el caso es que esta es la historia de Xypher, un cazador onírico al que se le ha permitido escapar de las torturas eternas del Tártaro durante un mes, tiempo en que vivirá entre los humanos aunque despojado de sus poderes. No tiene intención de regresar solo al infierno, en ese tiempo piensa dar caza a la mujer que lo traicionó y por la que lo condenaron, juramento que lleva tatuado en el bazo con su propia sangre. Claro que nadie dijo que fuera fácil.
Simone es una patóloga forense un tanto peculiar pues entre sus habilidades está la de comunicarse con los espíritus, de ahí que suela colaborar con el forense de la ciudad, habituado ya a las muertes extrañas y difíciles de explicar en sus informes por pertenecer a los escuderos de los cazadores oscuros, trabajo que se hereda de padres a hijos y que permite a los cazadores estar en contacto con el mundo de los humanos durante el día.
El destino, o los intereses de terceros, hace que Xypher y Simone se vean más que obligados a convivir gracias a unos bonitos brazaletes que les vinculan de manera vital, es decir que si muere el uno muere el otro, y que no les permiten separarse más que unos pocos metros porque si lo hacen mueren los dos. Así que en estas circunstancias no me negaréis que no serán normales los roces, más si el que te toca es el ser más desagradable y borde del planeta tierra pero al mismo tiempo uno de los más atractivos.

Pues eso, que el libro me ha gustado, muy en la línea de esta autora, he leído justo lo que quería leer y lo que sabía que iba a leer. Ha sido bastante emocionante, en esta entrega se desarrollan muchas acciones e intervienen muchos personajes, la mayoría nuevos pero otros ya conocidos de novelas anteriores, detalle que me encanta. Me he divertido mucho con el sentido del humor de ella y con la falta del mismo de él y con la relación que mantiene Simone con su amigo Jesse, el gran descubrimiento de esta historia. En cuanto al estilo de la autora es bastante ligero, ideal para estos días de calor, nada difícil de seguir aunque yo a veces me líe con mitologías, ascendencias y descendencias. Sí que a veces peca un poco de repetitiva, no en esta novela en concreto pero sí en alguna anterior, ya nos queda claro que el alma de él es un alma atormentada y condenada, que ella nunca ha encontrado el amor de su vida a pesar de que lo ha intentado en varias ocasiones, que su amor es imposible por razones que varían según la novela, pero en todos los casos se aman con locura, es decir, como en las doce anteriores. Ah! y últimamente la encuentro un tanto recatada, en cualquier caso, una pena. Así que sí, mi valoración para esta lectura es más que positiva.

Un saludo, Lola.

P.D. En la playa bien, ya desde la primera noche hice buenas migas con dos muelles, uno a la altura de la tercera costilla, con el que más he intimado, y otro justo en la pantorrilla derecha. Creo que los echaré de menos. Lo demás... genial.

P.D. 2: Dadme un par de días, lo justo para deshacer las maletas y os cuento sobre Cada siete olas ;)

jueves, 16 de junio de 2011

Vacaciones Junio 2011

Por fin este sábado viajo rumbo a playas alicantinas para pasar una idílica semana de vacaciones con la familia al completo, necesito unas vacaciones como el respirar, así que mucho me temo que durante ese tiempo esto estará un poco abandonado a su suerte. Volveré con noticias frescas -o con reseñas frescas que es más propio de lo que nos ocupa-, me llevo un par de libros en la maleta, Cada siete olas, porque quizá sentada en la tumbona, bajo la sombrilla y con factor de protección 50, descubra qué es lo que pasa cada siete olas, de hecho me encantaría que así fuera. Y desde hace semanas tenía pensado que el otro fuese El diablo puede llorar pero resulta que todo me hace sospechar que al final-en realidad tengo la certeza de que así será- se dará un pequeño cambio de última hora debido a su falta de disponibilidad y a mis escrúpulos más hitlerianos, tampoco es que me importe demasiado pues tengo en casa varios sin empezar de la misma autora esperando una oportunidad como esta. Sólo me queda decidir, a más tardar tendrá que ser esta noche porque esta noche me toca hacer la maleta -genial, Lola, dejando las cosas para última hora, te encanta trabajara bajo presión, eh? o quizá es el riesgo, el peligro?-.

Pues lo dicho, a portarse bien.

Un saludo, Lola.

miércoles, 15 de junio de 2011

Voy por...

...,y entonces me asalta la idea de que Clare lo sabe todo: nuestro futuro, nuestro pasado, todo, y tiemblo en la cálida estancia...

Página 215/598. La mujer del viajero en el tiempo. Audrey N.

No me parece justo, eso es jugar con ventaja. Es inquietante, me pone los pelos de punta.