lunes, 2 de septiembre de 2013

Cuatro amigos. David Trueba

David Trueba es uno de mis escritores favoritos y con cada novela suya que leo, más segura estoy de mis preferencias. Su escritura es ágil, fresca, desenfadada y cercana, que trata temas cotidianos en torno a las relaciones humanas y los sentimientos que éstas generan. Me gusta cuando escribe sobre amistad, lealtad, compromiso y amor.

Blas, Raúl, Claudio y Solo son los Cuatro amigos que ese verano, el de sus veintimuchos, deciden realizar un viaje sin rumbo, Sus veinte mil leguas de viaje subnormal. La idea es comprar un furgoneta -en la que su anterior propietario repartía quesos-, cargar sus maletas -con lo subjetivamente imprescindible- y salir a la carretera sin importar el destino. Cualquier destino será mejor que Madrid. Cualquier destino servirá para huir de sus vidas -claro que esto ellos no lo saben, aún-

Blas vive bajo el yugo de su padre, un militar retirado, cristiano y de derechas. Su físico no le acompaña y siempre tiene que conformarse con sus casi...pero representa la generosidad, el conformismo, la buena educación y el positivismo. Raúl se vio obligado a casarse de forma prematura y es padre de gemelos, se encuentra desbordado por la responsabilidad de su reciente paternidad y por las presiones de Elena para que asuma sus obligaciones. Es un ser frustrado profesional y personalmente y con cierta obsesión por determinadas prácticas sexuales, con todo ello es el más sensato de los cuatro. Claudio es el guapo del grupo, trabaja de repartidor, es despreocupado y juerguista y tiene a cualquier chica que se proponga pero, en realidad, su problema es el miedo al compromiso, el miedo a que le hagan daño. Y, por último, está Solo que procede de una familia acomodada pero que debe enfrentarse a la presión y a la critica constante de sus padres, un crítico literario y una crítica de arte. Siempre ha hecho lo que ha querido pero con la burla y la desaprobación de un padre cínico y prepotente. Además, en los últimos días, Solo recibe una invitación de boda que trastorna todo su mundo, arrastrándolo a llevar a cabo pequeñas rebeliones personales. La última, dejar el trabajo que su padre le consiguió en el periódico en el que trabaja. Los cuatro son deslenguados, irónicos, trágicos e insensibles. Por encima de todo son egoístas, cada uno se cree el ombligo del mundo, pero son amigos, y estas vacaciones pondrán en más de una ocasión a prueba su lealtad.

En realidad, es un viaje con el que tratan de retrasar un hecho que ya es inminente, la idea de hacerse adulto. Tratan por todos los medios de reafirmarse en su estrado de juventud, con sus ideales, su libertad e independencia, con todo lo que supone ser o creerse aún joven, pero lo único que conseguirán al final de su aventura es, precisamente, hacerse adultos. Sin más remedio, es hora de asumir responsabilidades y asentar la cabeza. Es el momento de asumir que, por mucho que uno quiera ser dueño de su destino, éste nos lleva en una dirección.

Esta novela supone un homenaje a la amistad y sus egoísmos y, a través de sus personajes y de la comicidad de algunas situaciones, ofrece una peculiar visión de la vida y el amor.  A través de las reflexiones de Solo, el protagonista principal, asistimos a otro de los temas importantes que rondan en esta historia, la reafirmación del yo, de todo aquello que conlleva la idea de sentirse dueño de la vida de uno. El principio de equivocarse o acertar pero siempre siendo uno mismo. Algo que su padre le dijo en una ocasión, Fracasa cuanto antes porque así tendrás tiempo en la vida para reponerte, página 259. Pese a sus ratos de risas, el fondo de esta historia es bastante deprimente, aunque no sé si es una sensación real o fruto del melodramatismo que los personajes aportan a sus existencias. En definitiva, Trueba nos obsequia con una novela divertida, irónica y exagerada que da gusto leer.

Un saludo, Lola.

PD: Creo que esta es la frase que mejor define la esencia de esta historia,

[...]comprendí, en cierta medida, lo que significaba la amistad. Era una presencia que no evitaba que te sintieras solo, pero hacía el viaje más llevadero.

página 259

5 comentarios:

  1. No he leído nada de este autor. Y me has tentado con esta historia de amistad. Voy a tener que probar prontito.
    Besotes!!!

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  2. La leí hace muuucho, pero recuerdo que me encantó. Después leí "Saber Perder", y me gustó aún más.
    Besos

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  3. Sí, es un autor muy bueno. Saber perder fue la primera novela que leí de él y de hecho, es una de mis novelas preferidas. Después leí Abierto toda la noche, buenísima. Así que cuando tuve ésta, no pude evitarlo. De verdad que merece la pena.

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  4. Me gustaría leer al autor, tengo pendiente Saber perder =)

    Besotes

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  5. Esta novela es buena la termine de leer hace unos dias. Me recomiendan otra del mismo autor?

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