jueves, 20 de noviembre de 2014

El año que pasé con Bevilaqua y Chamorro. Los cuerpos extraños

El cuerpo de la actual alcaldesa de un pueblo valenciano aparece semidesnudo y con marcas de estrangulamiento en una playa próxima a su lugar de residencia. El capitán Pereira sólo confía en Vila y su equipo para investigar, con la máxima discreción, una muerte en la que podrían estar implicadas algunas de las personas más influyentes de la zona, o lo que es lo mismo concejales de urbanismo, empresarios del ocio y de la noche, constructores.... Pero en este caso, Vila no sólo deberá centrarse en esclarecer la muerte de Karen Ortí Hansen, con sus muchos posibles sospechosos, porque la alcaldesa se ganó unos cuantos enemigos, y sus escasas pistas, si no que deberá lidiar con las rencillas locales y la oculta vida sentimental de Karen, además de trabajar cuidándose de los intereses de sus superiores y de la clase política en general.

Al final, en las novelas de Silva sólo hay dos posibles culpables, los muy evidentes o los más insospechados, sólo queda entonces resolver la forma de dar con ellos.
Creo que a estas alturas no es necesario añadir nada a este respecto. Uno más para la lista. El estilo del autor sigue la misma línea. La temática elegida para esta historia es bastante actual, hablar de una corrupción a la que tristemente estamos más que acostumbrados hasta como que carece de mérito, y es más que evidente que la población está cansada de la clase política y sus chanchullos. Que aparezca un cadáver en una playa es lo único que Silva necesita incluir para crear su historia. Así que supongo que la gracia de esta novela se encuentra en la vida diaria y en los sentimientos y confidencias que nos revelan unos personajes a los que ya se les empieza a coger cariño. Si me tengo que quedar con algo de esta nueva entrega estoy segura de que es eso. Una novela que no deja de ser entretenida pero que no estaría dentro de mis favoritas de la serie.

Un saludo, Lola.

viernes, 14 de noviembre de 2014

LA FRASE DEL DÍA

No se culpe. Lo que pudo haber sido nunca importa. Por algo no fue.

Los cuerpos extraños. Lorenzo Silva. Página 218.